El acoso contra la Educación y la Cultura no es
casual. Ambas son las excepciones a una regla no escrita que dice que
los principales espacios de influencia deben estar tomados por una
ideología conservadora
Pedro Almodóvar agradece el Goya a la mejor película por 'Dolor y gloria'.
Academia de Cine
En 2007, durante el primer Gobierno de Zapatero, el concepto 'pin parental' no existía aún, pero una asignatura, Educación para la Ciudadanía, "echaba a las calles a decenas de políticos conservadores y miles de padres preocupados e indignados con la terrible idea de que alguien pudiese adoctrinar a sus hijos" en ideas tales como 'cruzar el semáforo en verde', 'tirar el plástico al contenedor amarillo' o 'respetar al compañero negro'.
"Que las subvenciones al cine español supongan calderilla en comparación con otros sectores subvencionados, o que se sitúen a la cola de Europa, muy por detrás del apoyo público que el sector del cine recibe en países como Francia, Italia o Alemania, no ha hecho ni hará que las críticas desaparezcan". Que asignaturas como Educación para la Ciudadanía o que los 'talleres del plan educativo' tengan fines tan poco ambiciosos como "educar en mínimos de respeto y convivencia", tampoco.
"El acoso contra la Educación y la Cultura por parte de algunos sectores no es casual". Ambas son las excepciones a una regla no escrita que dice que, "en España, los principales espacios de influencia deben estar tomados por una ideología conservadora, cuya normalidad es la ausencia de ciertos valores de justicia social".
Educación y Cultura
No encontramos esas críticas contra 'el mundo del fútbol', "controlado por la 'crème' de la mafia empresarial y subvencionado con excenciones fiscales o cesión de terrenos públicos. Tampoco las encontramos en 'los toros', también controlados por un monopolio conservador y subvencionado", desde el que se emiten consignas que nunca son consideradas partidistas.
Si lo que preocupan son las 'subvenciones públicas' o el 'adoctrinamiento', sería de esperar que los mismos medios de comunicación subvencionados, mediante publicidad institucional y controlados por cuatro o cinco grandes grupos económicos, "se llevasen también las manos a la cabeza por cada ayuda pública recibida por la 'industria del automóvil', la 'banca', el 'calzado', la 'energética', la 'armamentística' o cada proyecto empresarial fracasado de Florentino Pérez ante el que el Estado responde económicamente". Nunca sucede. Como tampoco se detecta una especial preocupación por "el 'adoctrinamiento' que pueda darse desde otro espacio 'ultra subvencionado' como es la Iglesia católica".
La UE denuncia que las excenciones a la Iglesia católica son ilegales
Monarquía, empresariado, jueces, Fuerzas Armadas… "La lista de sectores que nunca causan revuelo por mucha doctrina ideológica y/o subvenciones que arrastren a su espalda es tan larga como corta es la excepción a la regla que dice que todo debe ser controlado por la 'ideología conservadora': principalmente Educación y Cultura".
No. "Los ataques contra los educadores o los creadores no tienen nada que ver con el adoctrinamiento o la subvención pública, sino con un sistema social español que tiende a un 'monopolio ideológico' que impone una ausencia de valores sociales como muestra de normalidad". Un sistema que, históricamente, ha fracasado en su intento de controlar esas dos piezas. Con lo que eso jode.
La 'ideología conservadora', expuesta por Burke y Maistre "se opone a los principios de la Ilustración y de la Revolución Francesa, defiende el legitimismo y la alianza entre la Corona y la Iglesia y aboga por la pervivencia de los privilegios de la monarquía y de la aristocracia".
FUENTE: ctxt.es
Tecetipos
Gerardo Tecé
27/01/2020
No hay comentarios:
Publicar un comentario